Mapa de españa meseta central

Comunidad Valenciana
En el mundo del vino, España sigue a la sombra de otros grandes como Francia e Italia. Pero el vino español es increíblemente diverso, con una mezcla de variedades de uva internacionales y autóctonas plantadas en distintos climas. Para sumergirse en este impresionante paisaje vinícola, lo mejor es observar el país a través de las regiones geográficas.
Desde la fresca costa noroeste de España hasta la calurosa y seca Meseta Central, existen más de 130 denominaciones formales de vino en todo el país que se adaptan a una serie de uvas y estilos de vino diferentes. Las seis regiones geográficas siguientes resumen zonas más amplias basadas en el clima y las variedades de uva.
El Valle del Duero, que recibe su nombre del emblemático río que se adentra en Portugal, presenta una orografía que varía entre las riberas aluviales y las laderas de margas y calizas. El valle incluye las regiones de Rivera del Duero, Toro y Rueda. Los parajes de la Meseta Central pueden alcanzar los 850 metros de altitud, con noches frescas y estaciones cortas. En la región predomina la producción de vino tinto, con tintos concentrados, de gran cuerpo y viva acidez. La tempranillo es la uva más plantada, con cantidades significativas de garnacha. En cuanto a los blancos, el verdejo y el sauvignon blanc son los principales protagonistas del Duero, y suelen expresar una buena acidez y mineralidad.
Meseta central
Geografía de EspañaLa geografía física de España es variada. España está situada en su mayor parte en la Península Ibérica, junto con la vecina Portugal. Los otros países y territorios que limitan con España son Francia, Andorra y Gibraltar (este último reclamado por Gran Bretaña). El mar Mediterráneo y el océano Atlántico constituyen las fronteras naturales del país. La superficie de la España peninsular es de 195.124 millas cuadradas, y el interior del país es más seco y cálido que las zonas costeras.
Resumen de la lecciónEspaña es un país europeo situado en la Península Ibérica. Tiene una superficie de 195.360 kilómetros cuadrados, lo que lo convierte en el tercer país más grande de Europa. Limita al norte con el mar Cantábrico, Francia y Andorra; al este con el mar Mediterráneo; al sur con el mar Mediterráneo y el océano Atlántico; y al oeste con el océano Atlántico y Portugal. Los accidentes geográficos de España son muy diversos. Tiene mesetas y llanuras como la Meseta, que cubre la mayor parte del centro del país, y las llanuras andaluzas. Estas mesetas están bordeadas y atravesadas por sistemas montañosos como los Montes de Toledo y el Cantábrico. Los Pirineos son otra importante cadena montañosa que forma frontera con Francia y Andorra. España cuenta con importantes ríos como el Ebro, que desemboca en el Mediterráneo formando el Delta del Ebro, y el Tajo (el más largo). También posee un extenso litoral tanto en la costa mediterránea como en la atlántica, con gran variedad de acantilados, bahías como la de Vizcaya y estrechos como el de Gibraltar. Una parte de la superficie de España se encuentra fuera de los territorios continentales, en islas como las Baleares y las Canarias (donde se encuentra el Teide, el pico más alto del país).
Sistema central
De alguna manera, los vinos españoles siguen pasando desapercibidos. Lo sorprendente es que España es el tercer productor mundial de vino y el país con mayor superficie de viñedo del mundo. (2,4 millones de acres)
El valle del Ebro tiene la suerte de recibir una influencia más mediterránea, con oscilaciones climáticas menos intensas. Por ello, la Tempranillo y la Garnacha producen vinos más afrutados y de estilo más elegante. Rioja es famosa por sus bodegas de larga tradición, como López de Heredia, que siempre producen tintos dignos de envejecer.
Muchas uvas crecen bien en Cataluña debido a los numerosos microclimas únicos, desde la costa hasta las colinas del interior. En la costa, el cava es la reina. El cava es la respuesta española al champán. Sin embargo, en lugar de utilizar las mismas uvas francesas de siempre, incorporan uvas autóctonas que dan lugar a vinos sabrosos y finos.
La zona de vinos tintos más potente es, sin duda, Priorat. Priorat, una parcela antaño olvidada (diezmada por la filoxera), pasó a convertirse en un centro neurálgico del vino tinto codiciado por la crítica. Las viñas viejas de Cariñena y Garnacha son la clave de sus tintos afrutados y pizarrosos.
Geografía de España
España está formada por partes de la Península Ibérica, las Islas Baleares y las Islas Canarias, y los enclaves de Ceuta y Melilla en la costa norteafricana. Las características topográficas más llamativas de España son su elevada meseta central y su división interna por barreras montañosas y fluviales. La península se eleva abruptamente desde el mar, con sólo una estrecha llanura costera excepto en las tierras bajas andaluzas. La mayor parte de la península es una vasta meseta interrumpida por montañas, profundos barrancos y amplias depresiones poco profundas. España tiene pocas bahías, prácticamente ninguna isla costera y escasean los puertos naturales. El conocimiento de la geografía de España es importante para comprender la historia del país.
Situación estratégica a lo largo de los accesos al Estrecho de Gibraltar; España controla una serie de territorios en el norte de Marruecos, incluidos los enclaves de Ceuta y Melilla, y las islas de Peñón de Vélez de la Gomera, Peñón de Alhucemas e Islas Chafarinas.
El clima de Madrid es predominantemente seco, soleado y agradable. Debido a su altitud (unos 2.000 pies sobre el nivel del mar) y a su proximidad a las montañas, Madrid experimenta a menudo grandes variaciones de temperatura entre el invierno y el verano. En invierno, las temperaturas descienden ligeramente por debajo del punto de congelación y muchos días de invierno pueden ser incómodamente fríos. Los veranos son bastante cálidos, con temperaturas medias al mediodía que oscilan entre los 28 y los 38 °C. Excepto en pleno verano, las tardes y noches son frescas. La temperatura media diaria oscila entre 50°F y 68°F durante 8 meses al año. Las precipitaciones son escasas, excepto durante una breve temporada de lluvias en octubre y noviembre y de nuevo en primavera. La nieve, poco común en Madrid, suele convertirse en lluvia y aguanieve en cuestión de horas.