El pantano mas grande de españa

Paso elevado del embalse de Negratín
Los embalses españoles han perdido esta semana 705 hectómetros cúbicos, lo que representa el 1,3% de su capacidad total. Así lo ha anunciado el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico. Las cifras indican que los embalses cuentan actualmente con 21.291 hectómetros cúbicos.
Esto sitúa a los embalses españoles al 37,9% de su capacidad. Actualmente, los embalses contienen 10.638 hectómetros cúbicos menos que la media de la década. Es decir, algo más de 4.000 menos que en el mismo periodo del año pasado.
Mientras tanto, ocho cuencas fluviales almacenan menos de la mitad de su capacidad permitida. Son los embalses de la cuenca del Duero, con el 40,6%; el Tajo, con el 39,5%; el Guadiana, con el 25,3%; el Guadalete-Barbate, con el 26,3%; el Guadalquivir, con el 23,2%; la cuenca mediterránea andaluza, con el 43,8%; el Segura, con el 39,2%; y las cuencas internas de Cataluña, con el 40,9%.
¿Cuáles son los mayores embalses de Europa?
Grandes presas
Los seis mayores embalses se encuentran en el sistema fluvial del Volga, en Rusia. El Kuybyshevskoye (6450 km2) y el Rybinskoye (4450 km2) son los dos mayores embalses. De los 13 embalses europeos con una superficie superior a 1.000 km2, sólo el holandés Ijsselmeer se encuentra fuera de Rusia y Ucrania.
¿Cuál es el mayor embalse del país?
1. Lago Mead, Nevada. Llamado así en honor de Elwood Mead, Comisionado del Bureau of Reclamation, el lago Mead es el mayor embalse de Estados Unidos, con 112 millas de largo y una capacidad total de 28.255.000 acres-pies, una costa de 759 millas y una profundidad máxima de 532 pies.
¿Cuáles son las presas más grandes de España?
1.Presa de Almendra (202 m)
Esta obra hidroeléctrica tiene una altura de algo más de 200 metros, con lo que se convierte en la presa española más alta, y tiene una longitud de 3.036 m.
Lago de Proserpina, cerca de Mérida (España, 4K)
En 1939, al final de la Guerra Civil, España había quedado devastada por la sequía y las batallas. Para hacer frente a algunas de las consecuencias de la guerra se fundó el Instituto Nacional de Colonización, dependiente del Ministerio de Agricultura. Se puso en marcha un Plan Nacional de Transformación y Colonización destinado a realizar una ingente tarea, la modernización de la España rural. Como consecuencia, se construyeron más de 300 nuevos pueblos para albergar a más de 55.000 familias a las que se concedió vivienda y propiedad de la tierra siempre que cumplieran las estrictas normas morales impuestas por el Régimen. Las aldeas, cuya calidad arquitectónica ha sido unánimemente reconocida, tenían siempre una iglesia como punto central y de referencia, rodeada de una plaza central y centro cívico, referencial de la vida comunitaria. Las viviendas unifamiliares reinterpretaban la arquitectura vernácula desde una perspectiva moderna e incorporaban servicios como baños y aseos privados, algo muy poco común en la España rural y pobre de la época. Grandes arquitectos modernos españoles, como Alejandro de La Sota o José Luis Fernández del Amo, diseñaron magníficas obras en las que cuidaron hasta el más mínimo detalle introduciendo el racionalismo en un contexto y un programa inusuales en la Europa de la época. Pueblos como Esquivel, Entrerríos o Villalba de Calatrava destacan como ejemplos extraordinarios.
La sequía deja al descubierto un pueblo en el embalse del Alto Lindoso (España) - BBC
Si viajamos hacia el norte desde el mismo corazón de la capital de España, pronto veremos un inmenso lago que se extiende por seis municipios de la comarca de la Sierra Norte. El lago tiene más de 90 metros de profundidad y hace que uno se olvide del asfalto y las carreteras de la ciudad, como si pertenecieran a otro tiempo y espacio. Pero lo cierto es que seguimos en la Comunidad de Madrid. Un Madrid diferente, más azul y más verde. Estamos en el embalse de El Atazar, el único océano de la capital de España.
La construcción del embalse comenzó en 1965 bajo la dictadura de Francisco Franco; éste fue, de hecho, el último embalse construido durante el régimen del dictador. El lago artificial se terminó en 1972 con un enorme gasto de 5.000 millones de pesetas, a pesar de que estaba previsto que sólo costara 1.000 millones.
Las técnicas empleadas para construir el mayor embalse de la Comunidad de Madrid fueron ciertamente innovadoras. Por primera vez en la historia de España, se utilizó una bóveda de doble curvatura, y el peso de la estructura se apoyó en el terreno natural. Sin embargo, las rocas de pizarra no soportaron la carga y la tensión creadas por el lago y la presa, por lo que tuvieron que reforzar algunas zonas con hormigón. En la actualidad, el embalse está gestionado por el Canal de Isabel II, empresa que gestiona el abastecimiento de agua a Madrid, y el embalse de El Atazar reúne el 46% de todo el volumen embalsado en la región.
PORTUGAL barragem Arade, Algarve (10 de abril de 2022)
Inmediatamente después de la Segunda Guerra Mundial, el proyecto, realizado por el arquitecto Joaquín Vaquero Palacios, y la construcción comenzaron. Para el pago de las obras, las empresas Hidroeléctrica del Cantábrico y Electra de Viesgo crearon la sociedad Saltos del Navia en Comunidad, avalada por el Banco Urquijo, cuya oficina elaboró los informes técnicos.
La presa se construyó entre 1948 y 1953 con 630.000 m3 de hormigón con taludes del 5% aguas arriba y del 72% aguas abajo. La altura sobre cimientos era de 132 metros, por lo que en su día se erigió como la mayor presa de España y la segunda de Europa.
Está situada 22 km aguas arriba del embalse de Doiras, y para construirla hubo enormes dificultades. España estaba sumida en la miseria y sufría el embargo de las potencias vencedoras en la II Guerra Mundial. Este proyecto era un sueño casi imposible y, sin embargo, se terminó en 1954 a pesar de la falta de recursos. Aunque las Naciones Unidas habían declarado el embargo contra la España franquista, el Reino Unido suministró en secreto las turbinas y los generadores[2].